viernes, 13 de noviembre de 2009

Falta poco


Creo que no soy la única en pensar que sólo faltan dos semanas para que se acabe el semestre, así como termine la pesadilla de los trabajos o exámenes finales. Yo por ahora espero ansiosa el 27 de noviembre, jejeje.


Debo decir que esta semana estuvo de locos, iniciando que no pude ver mucho al chico con canas quien la mayoría de las veces, me pone de buenas...digo, hay otras personas que deseas enterrarlas a mas de tres metros bajo tierra (omito nombres... ustedes saben, cuestiones de seguridad) y lo único que quieres ver, es a esa persona especial, jijijiji.


Se agradece que habrá un pequeño puente que no está libre de descanso, al menos te ayuda a que la semana se te haga más corta al grado de sen tir el final más cerca. A estas alturas ya no sé que hacer, ni sé si saldré el domingo con él al cine,... espero saberlo hoy para organizarme; o bien, "haga mis planes".


Por otro lado, debo tener cuidado (de nuevo) con lo que digo o mejor dicho, la manera en la que lo digo... eso a veces arruina las cosas y luego me siento mal. ¿Por qué? digamos que te pones de malas porque tratas de agradarle a alguien y, esa persona te sale con que una imagen ficticia... es mejor que ¡tú!. Esas palabras calan feo para el orgullo de una mujer, por lo que no se pensó en lo que se dijo; bueno, al final de cuentas yo tenía razón pero creo que esa no era la forma.


Yo estoy totalmente de acuerdo que a veces idolatramos a alguien ficticio porque se nos hace PERFECTO o bien, anhelas que sea real para tenerlo cerca. A mi me pasa mucho, pues admiro o muero por alguno que otro personaje ficticio; la gracia de esto radica en conocer los limites del mundo de las ilusiones y de lo real, al grado que esto no te afecte... yo no digo que él esté mal, ¡no! y está bien que tengamos nuestros amores ficticios (si puede decirse así), porque las ilusiones forman parte de la existencia humana pero sin llegar a ofender a la otra persona.


Yo sé que no es muy bueno dejar así las cosas pero ambos, somos de la política de evitarse problemas lo mejor posible. Sí, a veces hay que retomar esos elementos porque la comunicación es clave para una relación pero... siempre habrá algunos por los que no tiene caso tratar. En fin, espero no se repita, digo... una de las cosas que detesto SON LAS COMPARACIONES!!!!!!

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